Facundo Vacas, ingeniero civil, es un emprendedor inmobiliario mendocino que está a punto de terminar una maestría en Energías en la UNCuyo. Es la tercera que concreta, ya que cuenta con un MBA realizado en la Universidad Tecnológica de Córdoba y un master en Dirección de empresas de construcción e inmobiliarias otorgado por la Universidad Politécnica de Madrid.

Junto a su socio, el arquitecto Jorge Chirino, llevan adelante el proyecto “Moncloa”. Este complejo residencial de 6 dúplex de 2 dormitorios cada uno, ubicado en el Barrio Judicial de Mendoza, tiene como foco, la eficiencia energética. El monto de la inversión asciende a 40 millones de pesos.

De izq a derecha: Ing. Leandro Bernardi (Grupo LTN- Friolatina), Arq. Jorge Chirino (Arquitecto Moncloa), Ing. Hector Piriz (Grupo LTN – Friolatina), Ing. Facundo Vacas (Propietario Moncloa), Ing. Álvaro Romano (Dow), Marketing Talita Cassiano (Dow), Marketing Marcela Vergara (Grupo LTN – Friolatina), Ing. Dante Bragoni (UNC), Arq. María Victoria Mercado (Conicet), Luan Rocha (Dow).

“En varias clases de la maestría de la UNCuyo vimos la composición del gasto energético en Argentina. Un tercio lo ocupa el transporte, otro la industria y un tercero, el sector residencial y comercial.

Me interesé en profundizar la eficiencia energética en viviendas y en pensar cómo lograr confort térmico ahorrando energía”, cuenta Facundo Vacas. “Junto a Jorge Chirino nos animamos a romper con ciertos paradigmas de la construcción tradicional en Mendoza, desarrollar el complejo Moncloa y medir su impacto energético con el CONICET. A su vez, este será mi trabajo de tesis”.

 

Para llevar adelante el proyecto, los socios decidieron trabajar con el sistema de paneles aislantes de Friolatina, de Grupo LTN.

 

Al respecto, Hector Piriz, gerente de Investigación y Desarrollo de Grupo LTN (que anualmente fabrica 1.600.000 m2 de paneles) explica: “Utilizamos cerramientos envolventes con paneles metálicos de núcleos de poliuretano. Instalamos 750 m2 de paneles (540 m2 en muros y 210 m2 en cubiertas).

Además de traducirse en un ahorro energético del 50 % para el usuario, esta tecnología genera el mismo porcentaje de ahorro en energía embebida (la que se consume para fabricar un producto de la construcción). Hay una tendencia mundial de crecimiento de paneles aislantes para construcción. En 2018 se consumían 220 millones de m2 y para 2027, el aumento será cercano al 8 %. Como fabricantes, hemos percibido un incremento del 20 % anual”.

Otra parte involucrada en este proyecto es la compañía multinacional Dow Chemical, proveedora de Grupo LTN. Ambas empresas financiarán un estudio de medición energético del complejo que estará a cargo del CONICET y se podrá plantear en otras construcciones.

Lo que viene

Vacas adelantó a Ecocuyo que proyectan emprezar otro complejo de 10 unidades habitacionales con las mismas características. El complejo se llama “Callao”, que constará con 1.000 m2, sigue los mismos lineamientos de Moncloa.

¿Qué es el etiquetado energético?

Este índice mide las prestaciones energéticas que tiene una vivienda y las califica entre la A (mejor valoración) y la G. En Argentina ya existe una ley nacional que lo contempla y algunas provincias tienen sanción de ley provincial, como es el caso de Mendoza, pero no cuentan con su decreto de implementación.

“Moncloa es el primer complejo de departamentos en contar con etiquetado energético. Contratamos a una consultora para este fin y obtuvimos la calificación B. Para tener una idea, las casas de ladrillo se ubican entre la E y la F.

Jorge Chirino y Facundo Vacas, los socios que llevan adelante el proyecto Moncloa.

Otro dato importante es la huella de carbono. Los materiales utilizados generan menor impacto ambiental que los de la construcción tradicional. Incluso, lo vemos reflejado en la cantidad de escombros de la obra: fueron 3 contenedores, cuando en general, se utilizan más de 20 en proyectos de estas características.

En cuanto al avance de la obra, Facundo Vacas comparte: “Comenzamos los trabajos en octubre de 2021 y esperamos finalizarlos en dos meses. Este tipo de construcción también permite un ahorro en tiempos. El primer estudio del CONICET está previsto para diciembre”.